Un partido lleno de sorpresas y sonrisas…

El Olímpico de Montjuïc fue el escenario de un partido donde todo pasó en un abrir y cerrar de ojos. La temprana expulsión de Aritz a los 18 minutos hizo que los aficionados de la Real Sociedad sacaran sus pañuelos, pero para llorar de risa. Dani Olmo se puso el traje de superhéroe y participó en todas las aventuras peligrosas del partido, mientras Gerard Martín mostró esas pinceladas de genialidad que hacen que los culés sueñen despiertos.

El primer tiempo fue tranquilo para el meta polaco, que apenas tuvo que hacer algo más que respirar. Por otro lado, Héctor Fort entró en escena para mostrar quién es el jefe, reubicándose en el centro de la defensa.

La segunda parte fue un paseo en barca por el Mediterráneo para el Barça, con jugadores como Pedri y Lamine Yamal iluminando aún más el campo. Olmo dejó su huella firmando un partido redondo antes de irse a descansar en el minuto 71.

Con el encuentro ya resuelto, el entrenador Hansi Flick comenzó a pensar en la Champions, buscando que su equipo saliera con energías renovadas. ¡Una tarde de fútbol llena de magia!