El Benfica tiembla ante el samba de Barcelona…
A los veinte, Raphinha empaquetó sueños y calcetines para aterrizar en Europa, dejando atrás el sol de Brasil por los fados de Portugal. Allí, su andar fue más que desafiante: se enfrentó al Benfica ocho veces y apenas logró sostener un triste empate, mientras el club lisboeta le enseñaba el significado de la palabra «derrota» en portugués. Raphinha no lloró, aunque recordó el marcador a cero mientras seguía aporreando puertas rivales.
Pero en esta vida todo cambia, salvo las ganas de revancha. Ahora, el brasileño ha encontrado su ritmo en la orquesta culé del Barcelona. En los últimos dos enfrentamientos contra el Benfica, ha marcado tres goles, llevándose los aplausos y alguna que otra sonrisa de cómplice satisfacción. Si Raphinha continúa dejando rivales Lourdes tras su wake futbolístico, puede que hasta las estatuas del Camp Nou se levanten para aplaudirle.
El duelo definitivo asoma y las cartas están en el aire movidas por un viento catalán, que profetiza una dulce melodía para Raphinha. La hinchada blaugrana confía en que este jugador con sabor a samba les eleve a los altares de la victoria, mientras el Benfica trata de sortear las fintas y la magia de su former «frenemigo». ¡Que comiencen las hostilidades en el campo!
