Barcelona y Madrid se unen para honrar a Miñarro…

En un evento que parecía más un encuentro de titanes que un velorio, los grandes del fútbol se dieron cita en Barcelona para despedir al doctor Miñarro. Este médico ilustre, que más que recetas dispensaba buen rollo, dejó una huella imborrable hasta en los futbolistas más duros. Era tan querido que hasta el WiFi de la ciudad Deportiva lloró desconectándose un par de veces.

Jugadores del Barça llegaban cual cometas, en solitario o en pandillas, para rendir homenaje a su galeno predilecto. Hasta Joan Gaspart, ex presidente culé, se dejó ver, demostrando que los milagros existen. Lo curioso fue ver cómo los fans suspendían sus apuestas sobre cuántos goles habría en el próximo clásico, y en cambio apostaban por quién traía la mejor corona de flores.

Pero la sorpresa del día fue, sin duda, la aparición del Real Madrid, con Emilio Butragueño liderando la comitiva. Con diplomacia digna de película, fue recibido por Enric Masip, uniendo así ambos hemisferios futbolísticos en un minuto de silencio que tuvo que ser coordinado por tam-tam. En esta despedida, hasta las banderas se emocionaron, ondeando a media asta a ritmo de samba.