El brasileño busca zafarse de su «Oblakazo personal»…

Parece que Raphinha tiene una relación más complicada con el Atlético de Madrid que intentar terminar un cubo de Rubik a ciegas. El brasileño, quien ya podría abrir una tienda de goles con su marca personal de 27 esta temporada, tiene una extraña asignatura pendiente con el equipo de Simeone: todavía no ha sacudido la red de los rojiblancos en LaLiga.

A pesar de ser el terror de los porteros en la Champions, con más goles que un menú de tapas, su cuenta contra el Atlético sigue a cero. Hasta ahora, al verse las caras en seis ocasiones, Raphinha ha logrado acumular cinco pases de gol, pero nada de romper la defensa como un auténtico Panenka en el último segundo.

Este domingo, el Metropolitano podría asistir al gran destape del brasileño. Si logra marcar, será como ver a un elefante sobre una bicicleta; todos se preguntarían cómo es que esto no ha sucedido antes. Sin duda, Raphinha está más listo que un búho para, finalmente, entonar el famoso «¡gol!» y acabar con su sequía rojiblanca, haciendo que Jan Oblak y compañía se coman sus chuletas de jamón en señal de paz.