Un partido de fútbol o ¿la feria de la polémica?…

El héroe de la televisión, Kiko Matamoros, decidió colgar la capa del salseo en plató y ponerse la de detective en Twitter. Tras la trepidante victoria del FC Barcelona sobre el Celta de Vigo (4-3), parecía haber descubierto una conspiración tan grande como la del Área 51. ¡El Barça, transformándose en superhéroes sobre el campo! ¿Vendajes misteriosos? ¿Fuerzas sobrenaturales? ¿Lesiones autoinfligidas curadas por pociones mágicas? Sherlock está temblando.

Kiko, con el dedo más afilado que una tarjeta roja, no se anduvo con rodeos y acusó a los culés de ser una «banda organizada» digna de una película de mafiosos. Al leer al Barça alardear en redes, respondió con más caña que un perro ladrándole a un cartero: «¡Banda organizada!», clamó Matamoros, más calmado que un árbitro rodeado de futbolistas enfurecidos.

Pero el espectáculo de tuits no acabó ahí. Kiko, el genio del contraataque verbal, bombardeó a los catalanes con palabras tan coloridas como las vallas publicitarias de un estadio. Desde comparaciones con una cabra hasta la petición de quitar el carnet al árbitro, este madridista habla más de
cospiraciones que un fan de la serie Expediente X. Hay que dejar claro: cuando Matamoros encuentra un hueso, muerde fuerte —y si es del Barça, aún más.