¡El chico maravilla del Barça arrasa en los Laureus!…
¡Atención, damas y caballeros! El espectacular e inigualable Lamine Yamal ha capturado más trofeos que una horda de piratas náufragos en una isla desierta. Con apenas 17 primaveras y una sonrisa que podría iluminar el Camp Nou, nuestro joven Quijote del balón se ha embolsado el premio al deportista Revelación del Año en los prestigiosos Laureus, dejando en la cuneta a titanes del deporte como Julien Alfred o el mismísimo Bayer Leverkusen. ¡No me digáis que no es para quitarse el sombrero! Por cierto, Jude Bellingham, el laureado del año pasado, ya está haciendo planes para felicitarle con una tarta de zanahoria.
Llevando puesta la capa invisible de superhéroe, Lamine ha deslumbrado con sus proezas desde que ganó la Eurocopa con la selección española, cual David enfrentándose al gigante Goliat. Sin embargo, aquí no hay piedras, solo balonazos al estilo videojuego arcade trasnochado. Ha roto con tanto récord que la banda sonora de su vida sería como un disco de vinilo rayado, y su impacto recuerda a un Leo Messi adolescente en plena operación de encantamiento global. No hay rincón ni abuela en Barcelona que no hable ya de su mismísima excelencia futbolística.
Y qué temporada, madre del amor hermoso. El Barcelona parece que ha encontrado su Santísima Trinidad del Triplete con Lamine liderando la misión. ¡Supercopa, LaLiga y más copas a su haber! Este chaval no solo es el nuevo icono de los videojugadores adolescentes, sino que se ha convertido en el auténtico ídolo del Camp Nou, arrebatando más aplausos que un mago en un cumpleaños. Aparte de su reciente Laurel, ha añadido a su salón de trofeos el Kopa y el Golden Boy, dejando la vitrina más reluciente que el cotillón de Año Nuevo. ¡Agárrense, porque esto es solo el comienzo de un festival de magia made in La Masía!