La jueza saca tarjeta amarilla a las prisas…
En el caso más lento desde el nacimiento de un aficionado del Atleti, la jueza del Caso Negreira ha decidido aplazar las declaraciones de los expresidentes del Barça, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, hasta el 18 de septiembre. ¡Vaya manera de driblar el tiempo! Se dan seis meses más, como quien pide cinco minutos de tiempo extra en un partido decisivo.
La táctica defensiva parece que va amontonando jugadores (o, en este caso, excusas) en el terreno judicial. Las declaraciones previstas para junio se posponen gracias a la defensa que pide tiempo muerto. Como si el VAR estuviera revisando cada jugada, el nuevo juicio queda fuera de la prórroga inicial, dejando al caso más largo que un partido amistoso de pretemporada.
El FC Barcelona y su defensa atacan más que Messi en sus días de gloria, presentando recursos para revocar la prórroga de la instrucción. Alegan que no se ha visto ni tarjeta amarilla en la anterior prórroga, ¡ni una diligencia ni nada! Mientras tanto, Enríquez Negreira ha sido el único jugador que entró al campo y decidió quedarse en los vestuarios, alegando demencia y esperando que el árbitro-detector de mentiras no le preste demasiada atención. ¿Acabará este partido sin goles? ¡El tiempo lo dirá!