Ronald Koeman y su manual para domar al joven prodigio…
Ronald Koeman, el auténtico maestro Jedi del fútbol, aseguró que a Lamine Yamal, la joven promesa del Barça, hay que dejarle jugar sin presiones. Es como si le digeran a Spiderman que subiera paredes con más calma. Pero claro, Koeman, que en su día convirtió el vestuario del Barça en un aula mágica de jóvenes talentos, sabe bien de lo que habla. Es como un mago de Hogwarts, pero con un balón de fútbol en vez de una varita.
Recuerda con cariño su última hazaña copera contra el Athletic, una final en la que Messi elevó su última Copa para el Barça antes de irse al PSG en busca de zuecos parisinos. Koeman revive esos momentos como si fueran partidas de ajedrez humano, donde los jóvenes caballos como Pedri y Gavi movían sus peones con maestría. ¡Y pensar que ganaron 4-0 sin necesidad de trucos de magia! Seguro que ni Houdini lo hubiera hecho mejor.
En cuanto a Pedri y Gavi, los compara con robots programados para jugar al fútbol, eso sí, con más chispa que un cohete en Nochevieja. Aún así, Koeman admite que a veces se sintió más solo que una portería sin balón durante su etapa como técnico. Pero al final, los dejó a todos más afinados que un piano en la Filarmónica. Ahora, observa desde la distancia, sabiendo que los jóvenes tienen que seguir su camino sin tanta presión, como si fueran patos cruzando tranquilamente el estanque mientras los jugadores de la Quinta del Buitre volaban por el césped.
