Hansi Flick y la encrucijada del sofá…

¡Ay, Flick! Nuestro entrenador alemán favorito está en pleno dilema existencial: nariz pegada al televisor o pasar del partido. La decisión de su vida. Si el Madrid tropieza en un campo de plátanos y el Barça se lleva LaLiga, ¿será la TV culpable? Mientras otras personas tienen problemas con qué serie ver, Flick tiene la encrucijada del siglo: antes de comer el bocata o después. ¡Decisiones serias, eh!

Y no crean que lo tiene fácil. De repente se siente un poco como Nostradamus, augurando el futuro, pero en versión futbolera. Que si el RCD Espanyol parece entrenar con robots dueños de un campo de fuerza que hace que sus jugadores sean infranqueables. «Ellos han hecho una segunda parte de temporada tan buena que creo que son de otro planeta», dijo Flick mientras intentaba desbloquear el nivel secreto en su móvil.

Para colmo de males, Flick tiene un montón de fuegos que apagar: que si los affairs de renovación son dignos de una novela versión siglo XXI, que si hay jugadores que se lesionan al abrir la nevera… Pero, lo peor de todo, es ver a Ronald en modo «desconectando» en Milán. Pero lo mejor es que al final, todo es sobre fútbol, ni Sherlock Holmes, ni Scooby-Doo podrían resolver tanto embrollo.