Celebraciones desatadas al estilo azulgrana…
Barcelona, la ciudad de la Sagrada Familia y las tapas irresistibles, vio algo más divino que una obra de Gaudí: un Barça exultante, cubierto de azul y grana por la conquista de La Liga. Tanto fue el éxtasis que ni el Camp Nou podría contenerlo, así que, como auténticos trovadores, montaron su propia versión del ‘Got Talent’ ¡en el estadio del Espanyol! Pero claro, el respeto y la seguridad apagaron los primeros acordes que solo los oídos más afinados pudieron capturar.
Ya en casa, listos para dar rienda suelta a su creatividad lírica, los jugadores del Barça demostraron que podrían haber firmado un contrato con cualquier operadora de tono telefónico. Frente a la Joan Gamper, los acordes iban de una octava a otra mientras entonaban un cántico dedicado a su rival. Canción de amor… o no. Más bien postales y recuerdos para el Espanyol expresando el cariño más irónico jamás escuchado al pie de la montaña mágica.
Con una letra digna de telenovela deportiva, los azulgranas recordaron con cariño (y un dedo en la llaga) la historia del Espanyol. Desde el mítico Sarriá hasta su actual casa en Cornellà, pasando por antiguas glorias desenlaladas, los culés casi rezaron con ritmo y rima por su eterno rival. ¿Próxima parada? ¡El Barça Summer Festival!
