La portería del Barça parece una tómbola…
Hansi Flick, cual DJ en una boda, ha decidido cambiar el ritmo para el partido del domingo en Montjuïc. En cada rueda de prensa, Flick se parece más a una esfinge egipcia que a un entrenador de fútbol, pero lo que sí parece claro es que está pensando en poner a Ter Stegen bajo los palos, mientras Szczesny podría estar más cómodo en el banquillo, quizás tejiendo bufandas o tomando notas para su autobiografía.
Ter Stegen, tras un debut más accidentado que un grupo de turistas en un museo de porcelana, podría enfrentarse nuevamente a su némesis amarilla: el Villarreal. La saga Ter Stegen vs. Villarreal es digna de una película de alto presupuesto, con una primera parte que incluyó una lesión mayor que el ego de un influencer con cien mil seguidores. La última vez, un desafortunado cruce le costó el tendón rotuliano y 45 partidos fuera del campo. Pero ahora, ¡el héroe retorna!
A falta de dos jornadas para que el desfile de LaLiga termine, el destino de Szczesny se asemeja al de un personaje secundario en una telenovela: incierto y con capítulos por escribir. Deco ha lanzado un cebo en forma de renovación, pero el portero polaco quizá ya esté soñando con sus próximas aventuras, mientras Ter Stegen afila sus guantes para una posible tempestad amarilla. ¿Será el retorno del rey o una comedia de situaciones? La respuesta nos espera en el estadio.