¡Hristo, el Bruce Lee del fútbol da patadas! …

Hristo Stoichkov, el ninja del balompié, ha salido de su cueva para soltar unos nunchakus dialécticos contra Klopp y Raphinha. Parece que el Mundial de Clubes es el nuevo campo de batalla. Jürgen Klopp, entrenador y filósofo de banqueta, ha dicho que el torneo es la peor idea desde que alguien decidió mezclar piña y pizza. Pero Hristo, en sus declaraciones a MARCA y El Mundo, le recordó que cuando su Liverpool jugaba, solo aplaudía como un pingüino feliz.

Por su parte, Raphinha, el brasileño con más vacaciones en la agenda que cualquier ministro, se quejaba del duro calendario como si estuviera programado por el mismo Dr. Doofenshmirtz. Y Hristo, con su estilo de maestro Zen, le recomendó que se calmara, porque las quejas no valen cuando te firman un cheque de 20 millones. ¡Ah! Los días de gloria de Hristo, cuando con dos cambios en el campo parecían magia negra, quedan como recordatorio de tiempos más simples.

Por último, Stoichkov casi ofrece a Gianni Infantino un mando a distancia para controlar el clima, como si fuera un episodio de Los Supersónicos. Y mientras Klopp sueña con rodar por China y Japón, Hristo celebra que la FIFA ha creado un espectáculo que es pura poesía futbolera. «O botas o sofá, que bien se juega el Mundial», podría ser su lema mientras busca su camiseta retro.