Se retira el genio croata y se muda a los despachos…

¡Atención, atención, queridos lectores! Tras años de travesuras con el balón que harían palidecer incluso al mismísimo Scooby-Doo resolviendo misterios, Ivan Rakitic ha decidido colgar sus botas mágicas a los 37 años. Pero tranquilos, no se va al barilete cósmico del olvido. ¡Se convierte en directivo! Tras anunciarlo en un vídeo tan emocionante como un episodio final de una telenovela, el ex-centrocampista, famoso por llenar de alegría y algún que otro cachetazo a las defensas contrarias, se retira a los despachos del HNK Hajduk Split, su antiguo equipo.

Rakitic, ese caballero con capa llamado botas, ha dejado una estela de triunfos y fanfarrias tras su paso por LaLiga, tanto en Sevilla como en el Barcelona. Con más trofeos que un museo del Renacimiento, el croata conquistó 2 Europa League, 1 Champions y unos cuantos trofeos que ya ni cabían en su maleta. Al hablar del Camp Nou y recordar sus épicos días al lado de Messi et al, Rakitic no duda en mencionar lo mucho que soñaba con poder ponerse en el mismo once que SuperMario… ¡pero con espada láser en lugar de balón!

En su puesto como nuevo cerebro pensante en el Hajduk Split, hay rumores de que llevará a cabo reuniones mientras juega a la PlayStation y comerá ‘ćevapi’ todos los días, una técnica revolucionaria. Y es que, si uno ha sido casi campeón del mundo en la realidad, ¿quién puede negarle un poquito de fantasía en los despachos? Ahora, a falta de más Champions, a ver cuántas papeleras logra conquistar Rakitic con sus triples desde el escritorio. ¡Larga vida, Iván, señor de las fotocopias y campeón de corazones croatas!