El avance de Joan: más ráfido que un café expreso…

¡Paren las rotativas! Joan García ya pisa la Ciudad Deportiva antes que el despertador suene para los demás. Al parecer, nuestro nuevo héroe decidió adelantar su regreso como si estuviera participando en un concurso de maratón matutino. Este martes, el portero barcelonista estuvo probando los gimnasios como quien prueba los sillones de una tienda de muebles: un buen chapuzón de una hora para no perder la forma ni el humor.

A pesar de haberse adelantado, Joan no estuvo solo como el último bollo de la panadería. En una escena digna de una película de amigos, se topó con Andreas Christensen. El danés llevaba ya varios días presentando batalla al gimnasio como si quisiera retar a las máquinas a una lucha a vida o muerte por el músculo perfecto. Juntos, podrían abrir su propio club de entrenamiento pretemporal.

Y si pensabais que esto no podía ser más emocionante, el Barcelona nos trae la prueba de que el Black Friday se adelantó. La llegada de Joan por 25 milloncetes ha añadido una pizca de intriga a la portería, convirtiéndose en el cuarto fantástico del equipo. Porque, ¿quién no quiere tener más porteros que usados en un partido de barrio? Como dice el dicho: ‘Cuatro porteros ven más que dos’.