El misterioso caso de Ter Stegen, el excéntrico…
¡Ojo al parche! Los chicos de Hansi Flick han cambiado la pelota por pesas y ahora se creen finalistas de Mister Universo. En el cuartel general del Barça, situado en un bunker secreto (también conocido como gimnasio), los jugadores han sudado tanto que podrían llenar una piscina olímpica en sólo tres flexiones. Divididos como soldados en diferentes escuadrones, algunos levantaban tanto hierro que Popeye estaría celoso. Todo este espectáculo de músculos garantizó la tarde libre, y ya se sabe, un futbolista sin pelota es como un pulpo en un garaje.
Este sábado toca faena seria porque la agenda manda más que el profesor cuando toca examen sorpresa. Doble sesión de entrenamiento, por si acaso algunos pensaron que la mañana de hoy era el pase Premium a unas vacaciones anticipadas. Esta vez, el destino es Asia, donde prepararán lo que algunos catalogan como los tres combates más amistosos del año en Japón y Corea, con tanta expectación que ni David Beckham en un desfile de pasarela.
Mientras tanto, nuestro héroe alemán y guardián de los tres palos, Ter Stegen, ha optado por entrenamientos alternativos de técnica mixta. No se sabe si está jugando al escondite o si simplemente tiene más visitas médicas que un hipocondriaco, pero lo que está claro es que su futuro es un thriller digno de Netflix. Junto a él, Dani Rodríguez, joven promesa que, tras su debut, se lesionó como si estuviera jugando una partida intensa de Jenga, sigue recuperándose como un escudero fiel, ¡al margen del grupo pero nunca al margen del corazón del equipo!