El presidente azulgrana anima a los peñistas…
Joan Laporta aterrizó en Mallorca tan emocionado como un tiburón en una piscina de patitos de goma para acompañar al equipo en el estreno en LaLiga. Allí se rodeó de peñistas baleares, a quienes casi les promete la luna asegurando que Joan García y Rashford jugarán muy pronto. «Os digo que estoy casi convencido, casi convencido, de que mañana, si Hansi quiere, podrán jugar», afirmó Laporta. Y añadió, haciendo malabarismos verbales en un circo de emociones: «Esto es un trabajo que tiene una premisa: amar al Barça y luchar hasta el final».
Laporta no se olvidó de lanzar flores al entrenador alemán, Hansi Flick, describiéndolo como una especie de mezcla entre Beethoven y un director de orquesta en un derby. «Es una fórmula que funciona y que puede durar mucho tiempo», aseguró con gran entusiasmo. Y con una chispa en los ojos, continuó: «Para aquellos que aún no saben que el Barça ha resurgido, les digo que se sientan tranquilos, porque esto viene para largo, más largo que una eternidad en slow motion. Con el trabajo de nuestros jugadores y del experto Hansi Flick, los éxitos serán nuestra nueva rutina».