Un campo con recuerdos mixtos para los culés…

El Barcelona vuelve a pisar esta noche el Ciutat de València, un estadio que para los culés es como un flan de abuela con sorpresa: dulce, pero a veces te cae pesado. Allí levantaron dos Ligas, pero el campo parece tener más trampas que un campo de minigolf. En 16 visitas, la mitad de las veces se fueron sin los tres puntos, lo que es casi tan desesperante como cuando tratas de abrir una bolsa de papas fritas y se te rompen por todos lados. Celebraron títulos en 2005 y 2011, pero también se toparon con empates amargos.

Por otro lado, el Ciutat tiene una cara menos amable para los azulgranas, quienes han vivido derrotas tan amargas como morder una lima pensando que es una naranja. Desde un 5-1 en 1965 hasta revés inesperados como el 5-4 en 2018. Los últimos encuentros han sido igual de movidos, como una montaña rusa en un parque de diversiones abarrotado. Con Lewandowski de regreso y Levante ansioso por ganar sus primeros puntos, el campo promete ser un ring de pelea tan emocionante como un episodio de culebrón. ¡Que comience el espectáculo!