El Elixir Germano de Aleix y esperanzas Eurocopas…
En Uldecona, Aleix García se relaja como si fuera un koala posando para National Geographic, pero con la vista fija en la Eurocopa. Mientras descansa, su teléfono es como una patata caliente, nunca lo suelta. Y hablando del señor del timón, Xabi Alonso, Aleix está tan convencido como un pingüino en el Sahara: «Xabi al Real Madrid, sí o sí», predica en lo alto de su monte metafórico, mientras recuerda su temporada cruzando las tierras teutonas.
En Radio Marca, Aleix defendió su curso con el Bayer Leverkusen con la pasión de una madre orgullosa después de que su hijo perdiera el partido… pero escupiera en la cara al rival. «Somos subcampeones de liguilla, pero oye, ¡dos años invictos fuera!», exclama Aleix como si acabara de descubrir el Santo Grial. Señaló lo de siempre: ‘cuatro mediocampista buenos para dos puestos’, como la cola de la panadería un domingo.
El enlace con Girona es como ese coche oxidado que nunca vendes: mantiene contacto, lo valora, pero el GPS le lleva a Leverkusen. Michel es su Pep aunque Aleix insiste que prefiere las cartas del Leverkusen… igual que preferimos churros a ensalada. La Eurocopa espera, como un perro esperando al cartero.