¡Un viaje a lo épico con montañas rusas!…
¡Madre mía, qué movida! El Barça, como un ejército de guerreros que solo se ven en las pelis de Hollywood, logró una victoria que hasta los dioses del baloncesto están comentando en el WhatsApp celestial. Imagínate: con solo nueve jugadores, se enfrentaron al AS Mónaco en el Palau Blaugrana y se marcaron una remontada épica digna de una telenovela, igualando la serie con un 2-2 y forzando el quinto duelo de la Euroliga. Nuestro protagonista del día, Álex Abrines, estaba más emocionado que un niño en un parque de atracciones, y no dejó de sacar pecho (y músculos también) en Radio MARCA. ¡Qué fenómeno!
La defensa del Barça fue tan infranqueable que parecía un castillo medieval con cocodrilos y dragones custodiándolo. Dejar al Mónaco con solo 72 puntos es como impedir que Messi haga trucos con el balón: toda una proeza. Abrines explicó que la clave estuvo en esa defensa impenetrable que obligó a los del Mónaco a lanzar como si tuvieran los ojos vendados. Ahora, con la serie igualada, la cosa pinta más emocionante que un final de peli de superhéroes. Y nosotros aquí, pegados a nuestras sillas, esperando el clímax.
Pese a la emoción del momento, Abrines, con sabiduría de abuelo cebolleta, recordó que el trabajo aún no está hecho. «Queremos más, no hemos hecho nada todavía», aseguró, mientras su mirada se perdía en el horizonte como si lanzara un reto al mismo universo. Así que, el Barça viajará a Mónaco con la moral por las nubes, firmando autógrafos a las nubes, a las estrellas y hasta a los pececitos del mar. Porque ya lo dice el refrán: de dos victorias seguidas nacen las esperanzas. ¡A por todas en el quinto partido!
