¡Semana de infarto en Can Barça!…

Esta semana, el Barcelona se nota más movido que una gaseosa recién agitada. Empezamos el lunes con una carrera contrarreloj para cerrar el año fiscal como si estuviesen vendiendo churros en una feria. Joan Laporta se ha vestido de mago contable y prevé cerrar el año con casi mil millones en ingresos. Vamos, que si sigue así, será más solicitado que Papá Noel en septiembre. Pero, ojo, que no solo de números vive el club, también hay noticias bombásticas en el aspecto deportivo.

Cuidado con el sismo futbolístico: Ansu Fati podría estar empacando más rápido que un turista español al final del verano. Ya se ha visto en el Principado, esperando con más ansias que un niño en la puerta de la tienda de golosinas a que los clubes le den el visto bueno. Ansu se iría al Mónaco en calidad de cedido, no sin antes dejar bien amarrada su relación con el Barça. Y hablando de nombres que suenan más que las campanas de Fin de Año, tenemos a Nico Williams. Dicen que Laporta está preparado para hacer una oferta que haría que el mismísimo Sherlock Holmes levantara una ceja de asombro.

Sobre la mitad de la semana, todos los seguidores del Barça se sentirán como en la noche de Reyes, esperando la nueva elástica para la temporada 25-26. A este ritmo, y con tantos frentes abiertos, no se sabe si el equipo culé planea jugar al fútbol o resolver los secretos de la piedra filosofal. Con tanto movimiento, no queda duda de que el Camp Nou convencerá a todos de que las sorpresas en el fútbol están a la orden del día.