¡Goleadores impotentes ante el ‘Barça invencible’!…
A ver, a ver, ¿qué tendrá el Barcelona en su menú secreto que ni cuatro hat-tricks pueden detenerlo? Este club parece haber firmado un pacto con algún dios del fútbol: ‘Te concedo los goles, pero la victoria es nuestra’. Imagínense a Pavlidis, Guirassy, Iglesias y Mbappé, anotando como si fueran protagonistas de un videojuego y viendo después cómo la victoria se escapa de sus manos cual balón al río.
En el partido contra el Benfica, Pavlidis decidió convertirse en una máquina de fabricar goles en apenas media hora. ‘¡Ah, sorpresa!’, gritaban los hinchas al ver cómo el Barça remontaba en modo velocista de Fórmula 1. Pero la emoción continuó cuando Guirassy, con sus tres golitos, dejó a más de uno del Dortmund soñando con milagros en la Champions. Lástima que, a última hora, el balón enamorado de las redes del propio Dortmund decidió el destino: al finiquito.
Y luego tenemos a Iglesias, que armó su propio show pero solo para que Raphinha, el brasileño multi-tasking, le aguara la fiesta en el Celta. Y Mbappé, el nuevo Pichichi, que vio cómo el Barça se llevaba La Liga tras el vaivén de goles en los Clásicos. Está claro que en el libro de las Leyes del Fútbol (versión culé) dice: ‘Podrán marcar goles al Barça, pero a la victoria, ni hablar.’