Los palcos VIP, la nueva varita mágica del Barça…
¡Atención, aficionados del fútbol y de los palcos de lujo! El Barça está a punto de volver a la regla 1:1, que suena un poco a un nuevo baile de TikTok, pero en realidad es solo un truco para poder fichar con la libertad de antes. Todo gracias a la constructora Limak, que ha terminado los palcos VIP antes de lo que toma Messi en marcar un golazo. Ya se lo han contado a los ángeles de la guarda legales de LaLiga. Esos documentos pasarán por más revisiones que un ensayo de boda real.
Para recapitular, estos palcos VIP no son como las típicas sillas plegables de picnic. Hablamos de un negocio millonario que se concretó antes de Navidad, como si Papá Noel hubiera decidido dejar un regalo gigante en el estadio. Sin embargo, la historia tuvo más giros que un partido entre el Barça y el Madrid. Un auditor decidió dar marcha atrás, como cuando te das cuenta de que has dejado el gas encendido, y dijo que los palcos no valían hasta que no estuviesen más relucientes que los dientes de CR7 en su comercial de pasta dental.
En un impulso digno de un final de Champions, el Barça metió presión a Limak para que terminara los palcos antes de que el tiempo se agotara el 30 de junio. Y así fue, con el reloj aún en el campo de juego, Limak cumplió. Ahora, mientras sueñan con fichajes más jugosos que un asado argentino, el club solo espera que LaLiga diga los mágicos «sí, quiero» y abrace de nuevo sus poderosas habilidades fichadoras.
