Barça y el concurso nacional de llanto…

Gavi, nuestro poeta del balón, se mostró profundo y filosófico. Dijo que estaban «cagados» tras el choque contra el Inter de Milán. Sin aclarar quién merecía la medalla al miedo, decidimos imaginar que hablaba de un concurso de sustos entre fantasmas y futbolistas. ¡Más emoción que una película de terror en 3D!

Imaginen una gala de premios donde, en vez de Oscars, se entregan pañuelos dorados por el mayor dramatismo futbolero. Este año, el Barça parece ser el Manchester al que todo el llanto va. Los jugadores, desde el presidente Laporta hasta el aguador del equipo, participan en el acto. Y sí, todos los que por semanas dijeron que jamás llorarían, ahora podrían haber protagonizado Titanic parte 2: El regreso de las lágrimas.

Al final, parece que ni las experiencias exclusivas para socios ni los videoanálisis con música épica lograron calmar las aguas. Aunque sortearon pañuelos para socios de oro, todavía hay lágrimas para llenar una piscina olímpica. ¡Abónense ya para el siguiente episodio del lloriqueo mundialista!