El árbitro defiende la legalidad de un gol dudoso…

Si el fútbol fuera un safari, De Jong sería el camaleón del año, ¡mezclando su brazo con el pecho cual maestro del disfraz! En el minuto 32, el Barça empató y algunos pensaban que De Jong había jugado a ser un pulpo, pero Pérez Burrull, nuestro Sherlock Holmes del arbitraje, declaró: «Nada de mano, señores, más pecho que brazo», como quien evalúa una competencia de culturismo.

El bueno de Alfonso Pérez Burrull nació con el silbato incorporado. De niño ya ejercía de juez supremo en los patios de recreo, dictaminando penaltis y repartiendo tarjetas imaginarias a sus amigos por recrearse en las cartulinas. Con el tiempo, ascendió como un cohete al estrellato arbitral, debutando en Primera en un partido más importante que el debut de Messi. ¡Y en 2007 recibió el «Silbato de Oro»! Ahora se dedica a rastrear jugadas dudosas como un detective con pito.

En las ondas de «Marcador», un programa donde el fútbol suena a epopeya griega, oyentes entusiastas disfrutan un festival de goles. Cada fin de semana, Pablo Parra y sus compañeros te llevan de la mano —¡sin hacer falta!— a una narrativa de emociones y debates más emocionante que la final de una telenovela, pero con balones y sin pañuelos de lágrimas. ¡Ah, el fútbol!