Espanyol contra Barça: ¿A puerta cerrada y sin fantasmas?…

¡Atención, damas y caballeros! El encantador derbi de Barcelona, ese que hace que hasta la Sagrada Familia levante una ceja, podría jugarse a puerta cerrada. En vez de una multitud rugiente, tendríamos un silencio tan inquietante como una biblioteca sin bibliotecario. La fecha clave es el 15 de mayo, o como algunos lo llaman, el jueves mágico a las 21:30 horas. El Espanyol podría recibir al Barça sin los cánticos, el bullicio y, por supuesto, sin los abanicos colados de papel que siempre acaban volando desde las gradas.

Todo comenzó cuando unos traviesos mecheros decidieron hacer su debut en la liga, lanzándose al campo durante un encuentro con el Betis. ¡Dijeron que eran sólo aspirantes a OVNI! El árbitro Cuadra Fernández, entre risas, anotó en el acta que, por suerte, ningún jugador fue seleccionado como diana por estos pequeños proyectiles. ¡Menos mal que a los jugadores no les dio por lucir sombreros de copa, porque los mecheros habrían aprovechado para jugar a las dianas!

La ironía del destino es que el Espanyol ya estaba avisado por incidentes pasados: un vaso volador que impactó en el árbitro Quintero González. Si esto fuera una serie de comedia, el estadio del Espanyol sería el personaje con más mala suerte del reparto. Así es la vida del fútbol, llena de mecheros voladores y vasos revoltosos. ¡Que se preparen el Espanyol y el Barça porque, pase lo que pase, la emoción será como una explosión de confeti en plena fase de desempaño!