DJMaRiiO, entre la euforia y el abismo…
En un Clásico más épico que un partido entre superhéroes de Marvel, vivimos un auténtico espectáculo galáctico con siete goles que ni la final de la Champions en Montserrat. El Barça, cual tsunami inesperado, arrasó con las esperanzas del Real Madrid. Mientras tanto, DJMaRiiO, con cara de meme apocalíptico, vivía el partido cual telenovela mexicana, entre llantos y risas histéricas.
El Madrid comenzó más fuerte que un café doble, con Mbappé, nuestro superhéroe contemporáneo en pantalones cortos, marcando dos goles en diez minutos. DJMaRiiO ya sacaba su camiseta invisible del Mundial, animando con tal fervor que ni los Spaghetti Westerns tenían tanto drama. Los jugadores del Barça miraban asombrados, diciendo “Eso fue falta” mientras DJMaRiiO daba vueltas en la silla, gritando «¡Fútbol!» como si fuera Harry Potter lanzando un hechizo.
Pero, oh tragedia, el Barça decidió darle la vuelta al marcador como quien voltea una tortilla. De Eric García a Lamine Yamal, los goles venían como si fueran caramelos en Halloween. DJMaRiiO, con el corazón roto y la incredulidad grabada en su rostro, solo pudo ver cómo el 0-2 se deshacía entre sus dedos como arena del desierto. Solo le faltó gritar «¡Plot twist!» al estilo de las novelas de misterio, mientras el Barça aplicaba la ley del más fuerte y sellaba un juego casi épico. Y así DJMaRiiO terminó, en estado de shock, cantando gol para luego morder el polvo con frustración. ¡Quién diría que un partido podría ser tan teatral!