Así fue el épico concurso de gritos del Clásico…

Enric Masip, quien aboga por las causas justas en los banquillos y las protestas estilizadas en el Barcelona, se ha lucido con unas declaraciones dignas de un premio Oscar en un evento donde reunieron a leyendas capaces de deslumbrar con más paletadas de oro que el Pirata del Caribe. Parece ser que, en el Estadi Olímpic Lluís Companys, un árbitro dio un curso intensivo de movimiento de cejas amenazantes desde el minuto tres, armando un jaleo digno del mismísimo ‘árbitro ninja’. Estudiantes de karate, ¡tomen nota!

Masip, cual Sherlock Holmes del fútbol, habla de casualidades que no casualmente pasaron en Milán, donde el juez pitara cual señuelo móvil en medio de un episodio de Expediente X. Más de uno confundiría el VAR con una bola de cristal mística, dejando claro que ‘dalailama’ es aquel que habla, no el que pita. Al final, el Barça parecía estar participando en una competición surrealista llamada ‘Protesta tu protesto’ que, la verdad, haría palidecer a los camaleones más habilidosos de protestas camufladas.

Ahora, se avecina otro Clásico, y con LaLiga en juego, Masip se ríe de las apuestas y pronostica un desenlace con más giros que una novela de suspense. Asegura que la temporada ha sido un éxito rotundo, como si los títulos cayeran con facilidad de un árbol de navidad. Eso sí, con mucho orgullo, porque la victoria futura está hecha de esos momentos donde las palabras vuelan más alto que los balones. ¡Vamos Barça, las esperanzas son como pelotas de playa gigantes, imposibles de atrapar del todo!