El Barça quiere jugar sin perder a sus estrellas …
Al lío con las fechas se ha sumado el Barcelona, que ha echado el freno de mano ante la cita del 27 de marzo contra Osasuna, como quien no quiere la cosa. La fecha, decidida por el juez único de Competición, ha sido más impopular que la política de grupo de WhatsApp. El Barça ha decidido recurrir la sentencia como si de un gol en fuera de juego se tratara.
Mientras tanto, el juez único, como buen árbitro de este caos, se ha quedado con la paz de su lado. Y es que la crispación ha llegado a niveles de tertulia familiar en el Barça, que está en desacuerdo con la fecha impuesta. Alegan que el día propuesto es como intentar meter una gira de conciertos entre dos partidos complicados.
La razón del Barça para frenar el tren en marcha es tan simple como estratégica. Con estrellas como Araujo y Raphinha convertidas en turistas internacionales, el club quiere jugar con todas sus cartas sobre la mesa. El lío sigue, y la pelota está ahora en el tejado del juez, mientras los aficionados cruzan dedos para que no haya otro aplazamiento tipo serial telenovelesco.