Un fogonazo de euros en el Camp Nou…
Lamine Yamal, el Jedi del fútbol, ha firmado un contrato con el Barcelona que hará que su cuenta bancaria se parezca más al presupuesto de la NASA que al de un adolescente común. Este pacto intergaláctico se activará justo cuando cumpla 18 años, momento en que quizás celebre la mayoría de edad conduciendo su propio satélite. Y si alguna vez gana el Balón de Oro, que vayan sacando a Messi y Cristiano del museo de cera porque van a parecer aficionados con el sueldo de su edad.
Este contrato suena como la receta de la abuela: ingredientes fijos, variables al gusto y un toque de prima de fichaje que deja a su abuela y a las nuestras tan contentas. Si se alinea con las estrellas —o mejor dicho, con los balones de oro— puede embolsarse hasta 20 millones de euretes netos chiquitines. ¡Parece que lo entrenan en un campo de fútbol forrado en oro puro! Aunque Lewandowski ganará más en un principio, con el potaje de primas y bonus, Lamine seguramente lo acabará adelantando.
Mientras tanto, el resto del Barça se asegura de que el espacio de la masa salarial no les deje atrapados cual sardinas en lata. Laporta, con más arrugas de pensar en números que un libro de cuentas, tiene trabajo en renovar talentos hasta que los calcetines no encajan en los pies. Con Lamine Yamal a bordo de esta nave sideral, la galaxia culé parece estar preparándose para muchos años luz de triunfos. ¡Que tiemble la Vía Láctea! 🤯
