El subcampeón busca redención en la Champions…
En una temporada donde el Borussia Dortmund parece estar jugando al escondite en la Bundesliga, todo apunta a que su felicidad dependerá de la Champions League. Clasificados como el subcampeón que casi destrona al Real Madrid, los amarillos ahora se aferran a su escudo europeo como si fuera un flotador. En la liga, eso sí, parece que con apenas 35 puntos están más cerca del descenso que de cantar victorias.
El entrenador del Borussia, Niko Kovac, luce como quien encuentra billete de lotería a cada paso. Con su equipo jugando a la ruleta rusa en la Bundesliga, en Europa se pasea con estilo: invicto y con un coche de carreras amarillo rumbo a cuartos. «Amo la adrenalina y parece que a mis chicos también», bromeaba Kovac mientras sus jugadores celebraban otra noche mágica en Lille.
El único que tiene motivos para no perder la sonrisa es Serhou Guirassy, su delantero estrella. Sus 10 dianas en 12 partidos lo han convertido en el James Bond del ataque. Sin embargo, la defensa, más perdida que Wally en una feria, espera estas noches de Champions para demostrar que sabe algo más que abrir puertas al enemigo. En definitiva, los amarillos encaran al Barcelona como un taquillazo de cine; veremos si con final feliz.