Luis Enrique y el tango con la selección…
Luis Enrique, ese entrenador al que hasta el Ratón Pérez le tiene envidia por lo que ha logrado, ha deslumbrado a todos más que el brillo del sol en pleno verano. Su paso por el PSG es como si el ratón Mickey se pusiera a entrenar a los Avengers. Dicen que el mítico Flick intentó revolucionar el Barcelona como si lanzara un hechizo de Harry Potter, pero lo de Enrique es puro estilo a lo James Bond.
En el campo, Enrique ha logrado transformar al PSG tanto que dicen que hasta el césped quería jugar por él. Ganar títulos se ha vuelto algo tan rutinario para él como que el lunes sea día de gimnasio y dieta en el congelador. ¿Y esa final de la Champions? Fue tan arrolladora que si fuera una película, estiraríamos las palomitas de maíz del susto.
Mientras Flick imaginaba su pócima secreta al mando del Barcelona, Enrique retocaba la música para que sonara como una orquesta sinfónica. Así que, disfrutar del liderazgo de Luis Enrique es como ver a Messi y Cristiano intentar bailar salsa juntos. Y que quede claro: en el PSG, Enrique no solo ha sido director de orquesta, ¡ha sido toda la banda de música haciendo coreografías con el viento!