Cansancio, derrotas y un horario que desafía relojes…

Parece que al Inter de Milán se le ha fundido la bombilla antes de enfrentar al Barcelona. Los jugadores están tan cansados que hasta su despertador tiene sueño. Dicen que sufren de fatiga física y mental, y no es para menos, ¡parece que han estado contando goles de ovejitas en vez de marcarlos en el campo! Dos derrotas consecutivas sin anotar es como intentar dormir con el vecino haciendo reformas a medianoche.

Los ‘nerazzurri’, como héroes de cómic con capa y todo, han encadenado unas derrotas que parecen un reto de comedia slapstick. Si esto sigue así, es posible que los arcos rivales se conviertan en castillos de arena en la playa, imposibles de superar. Y es que, cuando el balón cruza el medio campo, parece que el Inter ha activado el modo «corre, pero no metas gol». Ni Messi driblando un rebaño de cabras podría salvarlos de estas dos noches oscuras.

Ahora, con más ojeras que un panda en época de cría, el Inter se prepara para encarar al Barcelona, tratando de recordar que el gol es algo que se mete en la portería, no se deja en la taquilla. Tal vez les vendrían bien unas vacaciones en la playa para cargar energías ¡y de paso para practicar tiros de chilena sobre la arena!