Bilbao contraataca con desafinados pitos…
Esteban Masip, heroico defensor de las buenas maneras y asesor estrella de Joan Laporta en el F.C. Barcelona, hizo estallar el cosmos de la diplomacia después de la batalla en San Mamés. Sí, el Barça ganó 0-3, pero cuando esperaban marcharse con la misma elegancia de James Bond, ¡ZAS! La afición del Athletic desafinó directo al alma del pasillo de honor. Mientras los pitos resonaban cual concierto sinfónico, Masip tenía preparado todo un discurso digno de Oscar: «Estamos desolados y decepcionados porque no nos felicitaron ni al presi Laporta por nuestra Liga, y eso, amigos, es como no aplaudir al que te regala un gol en el FIFA».
Pero el drama no acaba ahí. En medio de esta telenovela, los jugadores azulgranas rendían su propio homenaje al gladiador bilbaíno Óscar de Marcos, que después de 16 años en el coliseo se retiraba. ¡Qué momento! Masip, por su parte, se negaba a cambiar de tema ante las cámaras de ‘El Chiringuito’, dejando claro que los pitidos habían resultado ser más ruidosos que el cláxon del Batmóvil en pleno Gotham.
Así concluye una jornada futbolera que enfrentó a Enric Masip y a la afición del Athletic, cual épica batalla entre Supermán y aquellos que aún no descubren que el pasillo es sagrado. ¿Pueden los pitos desafinados realmente herir el orgullo catalán? Según Masip, mucho más que llevar calzado con calcetines en pleno verano. ¡Silencio, que habla Don Críticas!
