La revolución alemana en el Camp Nou…
Atención, señoras y señores, porque el hombre del año no es un futbolista musculoso ni un delantero que podría hacer goles con los ojos vendados. ¡No, no, no! El auténtico protagonista de esta temporada es Hans-Dieter Flick, el mago alemán que ha convertido al Barça en un equipo que parece salido de una fábrica de chocolate suizo. ¿Cómo lo ha hecho? Con oraciones muy bien articuladas y una estrategia de presión que parece diseñada por un fabricante de coches alemanes: todo encaja a la perfección.
Dicen que el Barça de Flick puede jugar como una bandada de pájaros en plena migración, ya sea volando a toda velocidad o posándose tranquilamente en el césped, según lo que pida la ocasión. Incluso el Real Madrid parece un grupo de estatuas de mármol frente a este ballet azulgrana. Flick ha transformado al equipo en una cuadrilla de jóvenes aventureros que, según Laporta, ‘van a hacer cosas’. Y, vaya, ¡cómo las están haciendo!
Con figuras como Iñigo Martínez demostrando que la edad es solo un número y jóvenes prodigios volviendo a brillar como bolas de discoteca, el Barça es un espectáculo irresistible. Parece que Flick ha encontrado la fórmula secreta de la Masía fusionando un caldero de talento joven con un toque de experiencia. Dice el alemán que están aprendiendo como los niños de primaria, lo cual promete una vuelta aún más grande el próximo año. ¡No se lo pierda, recoja sus palomitas y disfrute del show!