Un dominó azulgrana con fichas de lujo…

Hansi Flick, el genio de la lámpara futbolística, ha decidido que el Barça necesita más extremos que una pizza quattro stagioni. El buen Hansi y Deco han montado un braintrust digno de espías secretos para planear el fichaje de jugadores como Rashford o Luis Díaz. Imagínate a la plantilla como un dominó gigante: la llegada de cualquiera de estos fichajes haría temblar hasta las huesudas manos del mismísimo Johann Cruyff.

Todo este chisme revuelve más que una batidora: Raphinha, nuestro brasileño relámpago, puede terminar orbitando alrededor de media punta, más cerca de Lewandowski que del churrasco. Y el pobre Dani Olmo podría verse sacudido como si hubiera intentado hacer sudokus en la Torre Eiffel. Ferran Torres, el hombre multiusos, se las ingenia para colarse por cualquier hueco, mientras que Fermín, con su habilidad para esquivar sombras, baila en torno al dilema de la derecha inamovible de Lamine Yamal.

Y cuando pensamos que Gavi podría encontrar un respiro, nos damos cuenta de que su posición está más congestionada que un atasco en la M-30. Con Pedri brilla como un Sol de mediodía y De Jong jugando al escondite con su renovación, Gavi debe rebobinar al doble pivote, donde Casadó y Bernal han montado su fiesta privada. La temporada promete ser más entretenida que un capítulo de culebrón diario. ¡Que el espectáculo futbolero empiece!