Un final de película en la Copa del Rey…
La Copa del Rey se convirtió en un culebrón digno de las mejores telenovelas brasileñas. En el minuto 116, Koundé decidió que los penaltis son para los que tienen nervios de acero, y le dijo a Courtois «¡Que te den!» con un golazo desde la frontal. Todo gracias a un pase de Modric a Brahim, que parecía más bien un regalo de cumpleaños para el lateral del Barça. Rüdiger, ni corto ni perezoso, se unió al espectáculo desde el banquillo lanzándole un objeto al árbitro, como si estuviera en una feria de tiro al blanco.
El final del partido no escatimó en drama. Cuando el árbitro pitó, Gavi salió disparado como un cohete hacia Asencio, y con la bandera del Barça en mano, celebró la victoria justo delante de él. De hecho, lo celebró tan efusivamente que parecía estar coreando «Échate a llorar, blanco». Asencio no tardó en mostrarse ofendido como un pavo real herido en su orgullo, pero el bueno de Endrick intervino para calmar las aguas antes de que rodaran cabezas, literalmente.
Al final todo quedó en un malentendido digno de un episodio de «Riality Football Show», con Gavi paseándose por el campo cual rey de la selva, mientras sus compañeros de equipo reían como si no hubiese mañana. ¡A celebrar se ha dicho, que la Copa del Rey es blaugrana otra vez!