Los azulgranas sobreviven a la maratón internacional…
Vaya planchazo para Hansi Flick. El entrenador vio con horror cómo sus jugadores azulgranas acumulaban kilómetros y minutos en encuentros épicos, dignos de un guion de película de acción. Francia-Croacia y España-Países Bajos, se extendieron con prórrogas como si fueran maratones en Jumanji, obligando a sus pupilos a correr más que un repartidor de pizzas en hora punta.
Especialmente notable fue la heroicidad de Lamine Yamal y Koundé. El pobre Lamine, que parece que ni en sueños habla de descansar, jugó la friolera de 186 minutos, mientras que Koundé completó el circo de los horrores con 210 minutos de adrenalina pura. Ambos deberían ser considerados para el próximo concurso de resistencia física, aunque sea para probar la existencia de superhéroes secretos entre nosotros.
Por si fuera poco, Flick ahora tiene que armar en tiempo récord un puzzle llamado FC Barcelona contra Osasuna, Girona y la vuelta de Copa. Con Araujo y Raphinha atrapados en el otro lado del Atlántico por compromisos con el reloj mundial, el equipo parece más una banda de extenuados guerreros espartano que un conjunto de fútbol. ¡Suerte, Flick, porque la vas a necesitar!