Un adiós con guantes y giros inesperados…
¡Atención, aficionados del fútbol y de las pelucas invisibles! Iñaki Peña se plantó en San Mamés con la camiseta del Barcelona en lo que parecía una misión secreta al mejor estilo de un espía con guantes. Hansi Flick, el director de orquesta de esta comedia futbolera, le dio la titularidad al canterano alicantino, haciendo que la grada se preguntara si estaban viendo un mágico episodio final. Desde que llegó a la plantilla culé como un joven mago del gol en 2013, Peña ha vivido más temporadas de altibajos que un montaña rusa operada por un hamster hiperactivo.
Después de recorrer el mundo futbolero como un Harry Potter en busca del balón dorado, el destino quiso que Peña regresara al escenario azulgrana como el segundo portero con la esperanza de conquistar la titularidad. Pero en un giro de guion sorpresa al estilo de un telenovela turca, Szczesny se llevó todos los trofeos bajo el brazo, desde LaLiga hasta la Supercopa, superando a Peña como el nuevo héroe bajo palos. Peña sumó un cameo espectacular en 23 partidos, donde la matemática jugó su parte y dejó 25 goles en su marcador, pero San Mamés fue el broche de oro al mantener el marcador en blanco, como el fondo de un cómic.
Por otro lado, el futuro de Ansu Fati parece un enigma aún por resolver. Al pobre extremo lo dejaron más en el banquillo que la abuela en una fiesta de DJ, sin darle ningún minuto en el duelo contra el Athletic. Los rumores dicen que el Mónaco ya tiene los ojos puestos en él, mientras que él sigue buscando dónde puede encajar en este puzzle futbolístico. Así que, entre tiros de fútbol y decisiones locas de técnicos alemanes, el Barça cierra una temporada más que podría haber sido escrita por un guionista de telenovelas. ¡Si esto no es puro entretenimiento, no sabemos qué lo es!