Iñigo evita el gol y lo celebra a lo grande…

Iñigo Martínez se convirtió en el héroe del día, salvando la portería como si fuera un superhéroe que detiene un meteorito en el último segundo. En pleno descuento del partido en Butarque, nuestro valiente central evitó que Munir, del Leganés, lanzara el balón cual misil teledirigido hacia la meta de Szczesny. ¡Y lo celebra como si hubiera ganado la final del Mundial! Imagino que si llega a marcar un gol, lo celebraría convirtiéndose en Hulk de la emoción.

«Sabíamos al campo al que veníamos, como quien entra a un campo lleno de minas antipersona, llevábamos las botas puestas. Era un campo donde las ocasiones volaban como moscas y había que estar más despierto que un búho con insomnio. No siempre se puede ganar destrozando el marcador como si fuéramos titanes. Ganamos sufriendo y eso nos hace sentir más heroicos que un grupo de tortugas ninja», comentó nuestro protagonista experto en dramas futbolísticos.

Pensar siempre que ganar es cuestión de cinco goles es cosa de ingenuos. «Para nosotros, ganar así tiene un sabor especial, como conseguir la última galleta del paquete. El camino del sufrimiento es nuestro mantra, y conseguir estos tres puntos nos hace tan felices como una gaviota en un picnic playero», concluyó Iñigo Martínez, haciéndonos reír y llorar a partes iguales.