Un golazo digno de un héroe de cómic…
¡Atención, Barça-maniacos de la galaxia futbolera! Hoy os traemos el cuento del día en que Lamine Yamal decidió coser la capa de superhéroe y llevar al Barcelona entre sus jerséis mágicos. Exactamente, como si de un Leo Messi junior se tratara, nuestro héroe juvenil hizo un gol dignísimo de un guion de cómic. Tras una aparición a lo Dios del Trueno en el minuto 24, se deshizo de más jugadores que moscas en un picnic y lanzó un disparo que se coló en la portería como Reggaetón en una fiesta de cumpleaños. ¡Ahí comenzó el show de Lamine, querido lector! Más peligroso que un balón en una cristalería, el joven tumbó al mismísimo Inter.
Pero eso no fue todo, porque en un arranque de energía que dejó a los fanáticos sin palabras y con el desayuno en la garganta, hizo una jugada tan magistral que, por un segundo, nos hizo creer que el mismísimo Spider-Man le había prestado su telaraña para desbordar por la banda. Claro, el pobre Sommer, guardián de los tres palos, casi tira la toalla al ver un espectáculo semejante. Quien lo diría, la promesa del Barça mostrando destellos tan luminosos como una supernova en mitad del campo.
¡Ah, pero! antes de la magia y las ovaciones, hubo un momento de tensión. Nuestro valiente Lamine, la estrella azulgrana, casi se nos va durante el calentamiento, entre sudores fríos y caras de preocupación. Viéndolo en escaleras de vestuarios como si conspirara una jugada digna del Rey del Football, algunos temimos que el único show que veríamos esa noche fuera una edición especial del Sálvame futbolero. ¡Pero no! Al final, salió al campo, capeó la tormenta y demostró que está para cortes y saltos en el cómic del fútbol.
