Desmadre total en el Barça-Benfica…

¡Ay, Lamine, qué talento más rompedor, en todos los sentidos! Lamine Yamal nos regaló un espectáculo digno de aplausos desde el minuto uno contra el Benfica. El pobre Álvaro, desde la grada, debía estar agradecido por su sanción, porque el azulgrana montó un fiestón en el campo. Asistencia, gol y unas botas que no aguantaron tanta magia. Raphinha hasta se ofreció como limpiador oficial de botas tras el roscazo de Lamine. Aun con calzado roto, el joven artista pasaba de las ofertas del árbitro para tomar un zumito o un tentempié tras el Ramadán. ¡Le echa más ganas que yo al gimnasio!

El Barça arrasó al Benfica sin despeinarse. Raphinha, al que muchos querían poner en el mercadillo, lleva 11 goles en Champions. ¿Quién lo hubiera dicho? ¡El hombre está superando a los pesos pesados europeos y casi parece una broma! Y el cohete llamado Alejandro Balde sigue a toda marcha, aunque a veces sus compañeros necesitan una bici para alcanzarlo.

Además, Frenkie de Jong también se lució, justificando sobradamente por qué Flick le ofreció las llaves del mediocampo. Físico y visión de juego como para enfrentarse al mismísimo Thanos. Y recordemos al doctor Miñarro en el estadio: todos cumplieron con su homenaje ganando con estilo.