Jordi Alba, desde Miami con amor… y piña colada…

En el maravilloso mundo de Miami, donde los flamencos danzan salsa y las palmeras llevan sombrero, Jordi Alba, el legendario lateral del Barça, no pierde de vista las playitas… ni los goles del Barcelona. Resulta que este entusiasta del balompié y la sandalia playera está maravillado por la evolución de un joven que debutó todavía untándose Nocilla en los recreos: Lamine Yamal. Según Jordi, el equipo del Barça está en una versión tan fenomenal que hasta Pikachu se queda a entrenar con ellos.

Jordi anda más emocionado que un niño abriendo un sobre de cromos de La Liga. El chaval, que debutó a la tierna edad de 15 años, hizo que los jugadores mayores del Betis se preguntaran si habían olvidado a un hermano pequeño en el campo. ¡Lamine Yamal, el chico que dribla más rápido que los precios del chiringuito! Dame lomito, decía, mientras Alfonso traía la pelota.

Y como si esto fuera poco, Jordi lo proclama entre los candidatos al Balón de Oro con una seguridad que ni el mismísimo diccionario define. Así que mientras el inexperto Yamal sigue su ascenso meteórico, esperemos que sus oponentes lleven paracaídas, porque este chico va en avión y no para. ¡Que le vaya genial, muchacho! Lo mismo lo vemos en la entrega del Balón de Oro que sorteando piñatas en la próxima fiesta del Barça.