El presidente del Barça conquista la fiesta náutica…
¡Olé! Joan Laporta cambió el balón por el confeti al aterrizar en Las Palmas de Gran Canaria. La isla, famosa por su clima y su carnaval, recibió al presidente del Barça como si fuera el mismo Messi en pleno dribbling. Entre serpentinas y purpurina, Laporta lució su mejor ‘look’ en la fiesta del Real Club Náutico, donde se convirtió en toda una estrella.
Los asistentes, encantados con el «presi», se fotografiaron con él como quien busca un autógrafo de su cantante favorito. Carlos, un carnavalero avezado, comentó: «Al principio pensaba que era uno más, pero luego todos queríamos un selfie con él, siempre con esa sonrisa de portada de revista».
A la fiesta, que casi termina al amanecer, Joan no se quedó hasta tarde. Después de todo, hay que demostrar que se puede ser responsable también durante un carnaval.
Estratégicamente situado entre bailes y canciones de ‘Los Lolas’, Laporta dejó ver su lado más jovial, mientras evitaba con destreza algún que otro roce sobre el ‘caso Olmo’. Entre chistes y pasos de baile, el presidente logró brillar como ninguna estrella lo hace en la noche canaria.