¿Fichaje táctico o gestión sentimental?…

¡Atención, seres futboleros del planeta Tierra! Nico Williams ha decidido vestir de azulgrana y el debate hierve como café en desayuno de domingo. En la tertulia de La Pizarra de Quintana, parecen más emocionados que un niño en una tienda de chuches. Según dicen los sabios del fútbol, este fichaje es como encontrar un unicornio: puede llevar al Barça a conquistar la Champions, la luna y, de paso, el campeonato intergaláctico.

Fran Guillén, que parece tener antenas para captar fichajes genialmente estratégicos, afirma que tener a Nico es como poseer una varita mágica: dependerá del estado de Rafinha, pero el planteamiento no deja de ser un regalo del cielo. El jugaor de 21 años aterriza en el vestuario como quien estrena zapatillas nuevas y ya gusta a todos: hasta al jardinero del Barça, que dice que Nico planta goles y emociones como nadie.

Santi Cañizares, el filósofo del grupo, señala que cambiar Bilbo por Barcelona es un paso respecto a irse de vacaciones a Marte: algo que ‘se merece’. ¡Y qué decir del entrenador Flick! El hombre se siente como un crupier de casino repartiendo jugones: Nico, Rafinha, Olmo, Lamine… Parece que en el próximo partido, el Barça va a necesitar una pizarra más grande para encajar tanto talento e imaginación.