La odisea de fichaje de Pablo Torre…
¡Paren las rotativas! Pablo Torre, el Messi de los fichajes veraniegos, está a punto de hacer su entrada triunfal a la isla de Mallorca. El club balear, con más ganas que un niño en Nochebuena, planifica cerrar la operación antes de que acabe el fin de semana. Pablo Ortells, el Sherlock Holmes del fútbol, ha estado investigando cada rincón del caso para asegurarse de que el centrocampista decidiera entre el sol mallorquín o una oferta Champions al estilo de James Bond.
Los malabarismos de traspaso son más complicados que explicarle a tu abuela cómo funciona Internet, pero el Mallorca ha descifrado el enigma y ha ofrecido una fórmula tan ingeniosa que incluso los culés han dado el visto bueno, cuidando de no romper la hucha del cerdito en el proceso. A pesar de la ola de interés de un club con traje de gala, el fichaje va viento en popa y se espera que termine con aplausos, confeti y una recombra y futura venta en el contrato como bonus track.
Pablo Torre ya ha hecho las maletas, con bocata de chorizo incluido, para aterrizar cual astronauta en Mallorca y estar listo desde el primer día. El todoterreno está programado para rodar por Son Bibiloni a partir del 10 de julio, justo después de unas pruebas médicas que incluirán correr más que un gato en una bañera. ¡Arrasate, saca el balón que allá va Torre!