Una telenovela de paradas y desquicios…

¡Paren todas las máquinas! Porque la portería del Barça se ha convertido en el culebrón del día, con Ter Stegen desfilando por la cuerda floja como si buscara trabajo en el circo. Tras una década defendiendo la meta como un león enjaulado y con la gracia de un felino que hace yoga, ahora parece que lleva botas de plomo y le toca bye bye, adiós al club. Entran los rumores más veloces que un delantero con prisa al baño y se habla de fichar a Joan García como si fuera la novia nueva que el suegro aún no aprueba.

El silencio del Barça es como el del amigo que ni asiente ni niega, pero se queda con la barbacoa para él solo. Mientras Ter Stegen, con más años de servicio que un mayordomo victoriano, no sabe si le están cambiando el uniforme o el trabajo completo. La situación es digna de una novela turca con guion escrito por un panel de hinchas afónicos que no saben si ser leales al portero o a ese susurro descarado de cambio. ¡Que vayan al pressing catch y acaben con esto!

Entre tanto, nuestros especialistas en dramas deportivos —que también saben qué equipo ganó en el minuto 92 del partido de ayer sin pestañear—, se preparan para otra rueda de prensa de esas de «estamos muy contentos». Quizás toque la de «fichamos otro», o la de «Ter Stegen ahora es delantero». Mientras tanto, tú, querido aficionado, sigue esperando noticias como esperas el café matutino: con curiosidad y algo de pena si se enfría.